24 de noviembre de 2013
REVELACIÓN CUANDO TIENDO LA CAMA
No eran bollos de papel
las dos esferas que encontré arrugadas.
Y escritas con nada,
clavadas en mi almohada
con pupilas sin tinta.
No eran bollos pegados en mi cama
sin labios, sin rostro, sin cinta.
Mis sábanas, sus despojos.
Caléndulas blancas, no eran bollos.
Lo que yacía, eran sus ojos.
Por Piaconecta
piaconecta@hotmail.com
Fecha elaboración: 20/01/2000
Fecha última corrección: 24/11/2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
No hay comentarios :
Publicar un comentario