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Personas complicadas son aquéllas que ven más allá de lo que sus ojos pueden ver. Aquéllas que piensan más allá de lo obvio. Aquéllas que desean de la vida algo más que un matrimonio, una casa, un televisor de pantalla plana, hijos, un auto y un viaje a París. Aquéllos que quieren sacarle el jugo a la vida. Aquéllas que se acuestan a dormir pensando en sí mismos y sus emociones más profundas.
Una persona complicada es la que tiene sed de experiencias y aprendizajes, pues esto es lo que le hace falta para llenarse.
Una persona complicada es ésa que, al preguntarle “¿Qué opinas del mar?”, responde algo más que un “No sé, no lo había pensado. Es azul, bonito y lleno de agua. ¿Cuál era la pregunta de nuevo?”.
Una persona complicada cree en sí misma y en sus capacidades. Sabe que su complejidad la caracteriza y la separa de la simplicidad del resto del mundo.
Una persona complicada se cae y consigue la fuerza en sí mismo y nadie más para levantarse.
Una persona complicada descubre, a su manera, el significado de las cosas.
Una persona complicada le busca las explicaciones y los conceptos a las ciencias y las artes.
Una persona complicada está llena de creatividad para inventarse un concepto del mar así como “El mar representa la infinidad, pues es tan infinito como el universo y además cubre un gran porcentaje del planeta. Aparte representa para mí lo desconocido, pues soy fiel creyente de que allá abajo viven criaturas que no conocemos aquí arriba. Además es azul y hermoso. Tiene un toque de profundidad y belleza que nada más tiene”.
Una persona complicada no se cansa de preguntar y responderse. No se cansa de filosofar. No se cansa de vivir pues observa en la existencia algo complicado y hermoso.
Una persona complicada no se complica con los problemas del día a día, si no que consigue la manera de resolverlo y aprender al respecto.
Una persona complicada consigue las maneras de estar contento pues descubre, eventualmente, lo que quiere de la vida.
Una persona complicada no deja de soñar con sentimientos nuevos.
Una persona complicada mira en las películas de Matrix algo más que una trilogía de acción con buenos efectos especiales. Ve toda una filosofía de vida virtual y ve la magia del Oráculo.
Una persona complicada puede sentirse sola ante la simplicidad del mundo. Pueden juzgarla de ridícula o ilusa por sus pensamientos. Pero una persona complicada sabe que todos los triunfadores que se mencionan en los libros de historia, fueron personas complicadas.
Personas complicadas son aquéllas que ven más allá de lo que sus ojos pueden ver. Aquéllas que piensan más allá de lo obvio. Aquéllas que desean de la vida algo más que un matrimonio, una casa, un televisor de pantalla plana, hijos, un auto y un viaje a París. Aquéllos que quieren sacarle el jugo a la vida. Aquéllas que se acuestan a dormir pensando en sí mismos y sus emociones más profundas.
Una persona complicada es la que tiene sed de experiencias y aprendizajes, pues esto es lo que le hace falta para llenarse.
Una persona complicada es ésa que, al preguntarle “¿Qué opinas del mar?”, responde algo más que un “No sé, no lo había pensado. Es azul, bonito y lleno de agua. ¿Cuál era la pregunta de nuevo?”.
Una persona complicada cree en sí misma y en sus capacidades. Sabe que su complejidad la caracteriza y la separa de la simplicidad del resto del mundo.
Una persona complicada se cae y consigue la fuerza en sí mismo y nadie más para levantarse.
Una persona complicada descubre, a su manera, el significado de las cosas.
Una persona complicada le busca las explicaciones y los conceptos a las ciencias y las artes.
Una persona complicada está llena de creatividad para inventarse un concepto del mar así como “El mar representa la infinidad, pues es tan infinito como el universo y además cubre un gran porcentaje del planeta. Aparte representa para mí lo desconocido, pues soy fiel creyente de que allá abajo viven criaturas que no conocemos aquí arriba. Además es azul y hermoso. Tiene un toque de profundidad y belleza que nada más tiene”.
Una persona complicada no se cansa de preguntar y responderse. No se cansa de filosofar. No se cansa de vivir pues observa en la existencia algo complicado y hermoso.
Una persona complicada no se complica con los problemas del día a día, si no que consigue la manera de resolverlo y aprender al respecto.
Una persona complicada consigue las maneras de estar contento pues descubre, eventualmente, lo que quiere de la vida.
Una persona complicada no deja de soñar con sentimientos nuevos.
Una persona complicada mira en las películas de Matrix algo más que una trilogía de acción con buenos efectos especiales. Ve toda una filosofía de vida virtual y ve la magia del Oráculo.
Una persona complicada puede sentirse sola ante la simplicidad del mundo. Pueden juzgarla de ridícula o ilusa por sus pensamientos. Pero una persona complicada sabe que todos los triunfadores que se mencionan en los libros de historia, fueron personas complicadas.
http://brujitav3ro.blogspot.com/2006/11/complicada-yo.html
3 comentarios :
Hola, jejeje te copie esta entrada de la brujita; es que me senti identificado, imagino que tú también.
Pero nosotros hacemos la diferencia.
El sabio cambia de opinión; el necio, nunca.
El ignorante afirma, el sabio duda y reflexiona.
ya leere mas tú blog, ya que ese es tu interese más de que lean tu perfil.
Genial! También entré al tuyo. Muy buena la frase de cabecera.
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